Pese a sumario y reiteradas denuncias, los directivos del penal militar siguen impunes.
El Ministro de Defensa, General Óscar González, estuvo hablando con la prensa tras los polémicos acontecimientos protagonizados por militares. En los últimos días vimos a través de las redes sociales a los efectivos cantando canciones denigrantes hacia las mujeres y a otros torturando a subalternos.
Sobre el mismo, el General dijo que los efectivos deben ser dados de baja por su actuación, refiriéndose a los torturadores.
“Ellos están presos en Viñas Cué y si fuera por mí, tienen que pagar su delito en lo que corresponda en pena privativa de libertad y después deben ser dados de baja de las Fuerzas Armadas”, expresó a radio Monumental.
Llamativamente, en esta misma prisión se han denunciado casos de tortura, maltrato, tratos denigrantes y hasta arrestos arbitrarios que no captaron su atención. Estos hechos igual de graves que los que han sucedido la semana pasada, apuntan al director del penal, el coronel José Daniel Flor Sánchez y al director del área penal, el mayor Guillermo Moral por lo que deberían tener un tratamiento similar.
Sin embargo, la celeridad no es precisamente lo que se busca ya que el sumario a Moral se encuentra durmiendo en algún cajón polvoriento, sin resolución alguna. Mientras que Moral a pesar de haber sido imputado en casos de años anteriores, ni si quiera tiene antecedentes.
La justicia selectiva se hace notar en las esferas militares, pero la consulta es ¿hasta cuándo?
