Afirman que altos mandos actúan con impunidad.
Cuando publicábamos acerca de la denuncia de presunta tortura suscitada en la cárcel de Viñas Cue, como si fuera que aún seguimos bajo las botas de régimen stronissta.
Pero, pensándolo bien y analizando un poco este caso, creo que a muchos militares no se les reseteó el chip y se quedaron estancados en el tiempo donde el caudillismo y el amiguísimo para blindarse y operar impunemente.
Creo que esto podría estar pasando con dos militares de alto mando que son los sindicados como los presuntos responsables de propiciar estas prácticas medievales de humillación a los subalternos.
La denuncia que llegó hasta Churero.com afirma que hubo un arresto sin previo sumario, siendo víctima el sargento ayudante, Ramón Rojas, y según afirman esto sucedió el pasado 18 de agosto, por orden del Coronel José Flor y el Mayor Guillermo Moral.
Este hecho cobró estado público y los ordenantes se vieron obligados a levantar el arresto.
Cuando se le levantó el arresto al sargento, éste se niega a firmar el documento ya que, según él, fue privado de su libertad de forma arbitraria y ahí se produjo el maltrato verbal por parte del Mayor Moral, según la denuncia.
De ser cierto esto, requiere una pronta intervención de las autoridades y sobre todo un estricto control en las filas militares. Sabemos que no hay necesidad de llegar a la violencia ni psíquica ni mucho menos física para que un cuerpo colegiado funcione y se propicie un ambiente respetuoso de los derechos humanos, en igualdad de condiciones.