El mayor Guillermo Moral y el Coronel Flor se encargaron de guiar a su contralor.
Cuando recibí esta información me vino a la mente un dicho popular “poner al gato a cuidar la carne” o “amigo el ratón del queso”, frases muy utilizadas cuando una persona opera según su conveniencia y a la larga terminará quedándose con el botín.
Al ver las fotografías del recorrido del Defensor del Pueblo, Rubén Ávila por el penal de Viñas Cue, me percaté de que los que hacían de “guía turística” eran los propios denunciados de orquestar las supuestas torturas suscitadas en dicho penal, nada más y nada menos que el Mayor Guillermo Moral y el Coronel José Flor. ¿Habrán estrechado algún lazo de amistad y por esa razón se dio esta “visita de cortesía”?
Fueron ellos quienes se encargaron de dirigir la verificación de la “limpieza” del recinto. Así también, sabemos que en Viñas Cue hay varios reclusos, incluido el presunto capo narco, Tío Rico, pero, casualmente, en las fotos, solo apareció un preso identificado como Enzo Cardozo, todo esto en base a las averiguaciones que realizamos desde Churero.com al acceder a las fotografías del recorrido.
Me pregunto si el defensor se confundió de objetivo y en lugar de ir a verificar la veracidad de las denuncias, fue a corroborar que no existan criaderos de mosquitos ya que estamos cerca del verano y sabemos que nuestro calor siempre viene cargado de unas cuantas plagas como el dengue y el chikungunya, ya que fue a verificar la “limpieza”, quizás, le preocupó tempranamente que los presos no sean picados por los mosquitos, digo yo.
Pero desde acá le decimos al Defensor que en lugar de estos controles debería prestar atención a las denuncias y gestionar el esclarecimiento del hecho, sin parcialidad alguna. Señor Defensor, cumpla con su trabajo que de la limpieza se encargan los de la Municipalidad y la gente del SENEPA cuando organizan sus mingas ambientales.